Ocurrió en el control migratorio del Aeropuerto Internacional de Norfolk en Virginia
Sorpresa y conmoción fue lo que sintieron las autoridades de la Administración de Seguridad de Transporte de EE.UU. (TSA por sus siglas en inglés), luego de ver a través de los rayos X un gato vivo dentro de la maleta de mano de un pasajero.
El hecho sucedió el pasado viernes mientras el pasajero pasaba el control migratorio del Aeropuerto Internacional de Norfolk en Virginia. La información fue publicada en Twitter por la portavoz de la TSA, Lisa Farbstein.
“Justo cuando pensabas que era seguro llevar a tu gato de viaje. . . Un viajero dejó a su gato en su maletín de viaje en un puesto de control de la TSA esta mañana en el Aeropuerto de Norfolk. Atención dueños de mascotas: Por favor no envíen a su mascota a través de la unidad de rayos X. ¡Error catastrófico!”, escribió Farbstein.
La portavoz acompañó el texto junto a una radiografía del gato.
En EE.UU., los viajeros pueden llevar gatos o perros pequeños en maletines para mascotas en la cabina del avión, sin embargo, en este caso, el gato había sido enviado por error a través de la máquina de rayos X en lugar de sacarlo primero de la bolsa, según escribió el New York Post.
Ante los múltiples comentarios que recibió la publicación de Farbstein de usuarios que preguntaban por la salud y el bienestar del animal, esta confirmó que tanto el viajero como el gato debían pasar por el examen de manera adecuada después de que los agentes de la TSA vieron la imagen de rayos X.
“Está bien el gato?”, preguntó un usuario.
La portavoz de la TSA le respondió: “Sí. El viajero y el gato tuvieron que pasar por el control de manera adecuada una vez que los oficiales de la TSA vieron la imagen de rayos X. La forma correcta es sacar al gato de la bolsa de viaje”.
Ferbstein también subió un video a Twitter sobre la forma correcta de viajar con una mascota a través del punto de control de la TSA, donde los propietarios sacan a la mascota del maletín de transporte antes de que se haga una radiografía de la bolsa.
Aseguró que los viajeros con gatos pueden solicitar que la evaluación se realice en una habitación privada, en caso de que el propietario tenga un corredor en sus manos.