En un evento que capturó la atención del mundo del boxeo, Jake Paul, un conocido influencer y youtuber, derrotó a Mike Tyson en una pelea celebrada en el AT&T Stadium en Texas, Estados Unidos. La contienda, que se extendió a lo largo de ocho rounds, culminó con una decisión unánime a favor de Paul, quien es 31 años más joven que Tyson.
La diferencia de edad entre los dos boxeadores fue un factor determinante en el resultado del combate. A medida que avanzaban los rounds, Tyson mostró signos de cansancio, lo que permitió a Paul mantener el control de la pelea. Los jueces otorgaron la victoria a Paul con puntuaciones de 80-72, 79-73 y 79-73, reflejando su dominio en el ring.
El enfrentamiento entre Tyson, una leyenda del boxeo conocido como Iron Mike, y Paul, quien ha ganado notoriedad en las redes sociales, generó gran expectativa y debate en el ámbito deportivo. La pelea no solo atrajo a los fanáticos del boxeo tradicional, sino también a una audiencia más joven, familiarizada con el contenido digital de Paul.
Entre varias personalidades destacadas que se hicieron presentes en la gala, se destacaron las de Evander Holyfield, Sugar Ray Leonard y Lennox Lewis, hombres que hasta ingresaron al vestuario de Tyson a minutos de saltar al ring. Fue Lewis el encargado de una breve arenga, tras el reclamo del propio Iron Mike para motivarse: “Métete ahí y patéale el trasero. Eso es lo que haces. ¡Hazlo!”.
Una breve entrevista transmitida en vivo desde el vestidor de Mike lo mostró -literalmente- al desnudo. Cuando le consultaron por una predicción, se atrevió a vaticinar: “Una victoria viciosa”. Y luego de estrecharle la mano al reportero, Tyson se giró y mostró su trasero, ya que todavía no estaba cambiado y permanecía en paños menores. La nota estuvo lejos de ser más profunda como la que le había concedido a una niña de 14 años unos días atrás, en la que se sumergió en un debate que sorprendió a más de uno: “¿A quién le voy a importar cuando esté muerto?”.
Camino al ring, Tyson salió solo vestido con una bata negra y la canción “Murdergram” de Jay-Z, con Ja Rule y DMX, para pelear contra Jake Paul. Un detalle no fue pasado desapercibido por los usuarios: Iron Mike tuvo un leve tropiezo mientras caminaba hacia el cuadrilátero, pero se mantuvo concentrado al 100% tal como lo hizo a lo largo de su trayectoria profesional.
Por su parte, Jake Paul apareció sentado en la parte de atrás de una especie de limusina convertible de color verde y acompañado de su tropa. El tema que eligió para su ingreso hizo referencia a la película de comedia Hangover, que justamente Tyson protagonizó. En esa escena, Mike canta justo antes de derribar de un puñetazo a uno de los protagonistas, luego de comprobar que se habían metido en su casa y se habían robado a un tigre que tenía como mascota.
Sobre el final, a Tyson se lo vio lento y acusó la diferencia de edad. Jake Paul mostró interesantes combinaciones ante una buena defensa de Tyson y ejecutó dos buenos derechazos ante un Mike que no sacó guantazos y estuvo más estático. En los últimos dos asaltos, Tyson salió más decidido y conectó a su oponente con un zurdazo. Paul continuó con el jab de zurda y buscó al plexo de Mike, ya demasiado fatigado a esa altura. El influencer agotó su energía y conectó varios golpes a un Mike que solo atinó a ensayar un zurdazo.
Antes de que culminara el combate, Jake Paul hizo una reverencia frente a Mike Tyson y luego trasladó su gesto ante las cámaras y el micrófono: “En primer lugar, Mike Tyson, es un gran honor. Rindámonos ante Mike, hermano. Él es una leyenda. Es el más grande que jamás lo haya hecho. Él es el GOAT (más grande de todos los tiempos). Lo admiro. Estoy inspirado en él y no estaríamos aquí hoy sin él. Este hombre es un ícono y es un honor poder pelear contra él. Y obviamente es el hombre más duro y malo del planeta, así que fue realmente difícil como esperaba que fuera”.
Fuente: Infobae